Alcalá inaugura un memorial en recuerdo a los fusilados por el franquismo
La ciudad de Alcalá de Henares ya cuenta con un lugar para el recuerdo de las personas que sufrieron la represión con la llegada de la dictadura franquista. Al borde del río Henares, en la denominada ‘Playa de los Alemanes’, en las inmediaciones del Val, se ha inaugurado un memorial que recuerda a los allí fusilados tras la Guerra Civil.
En el emotivo acto celebrado el 5 de mayo de 2018 estuvo encabezado por el Alcalde de la ciudad, Javier Rodríguez; la edil de Patrimonio, Olga García, y el presidente de la Asociación para la Memoria Histórica de Alcalá de Henares (ARMHADH), Manuel Ibáñez. También estuvieron presentes familiares de los que allí fueron fusilados en 1939.
En sus intervenciones, tanto el primer edil como la concejala de Patrimonio destacaron la importancia de esta memoria y recordaran que “no hay verdadera paz sin justicia ni memoria”.
Por su parte, el presidente de la ARMHADH recordó la finalidad de la asociación, investigando y difundiendo aspectos históricos de una época oscura y muchas veces olvidada, recogiendo el testigo de otras asociaciones que previamente también han desarrollado su labor, con el Foro del Henares.
Este memorial nació tras conocer la ARMHADH historias orales sobre la posibilidad de que, inmediatamente terminada la Guerra Civil, se produjeran en la zona del Val fusilamientos. Tras consultar diferentes fuentes, artículos previos publicados en prensa local y localizar documentación clave en el Archivo Municipal, se solicitó en 2015 a los partidos políticos su implicación para erigir un memorial que recordase aquellos acontecimientos.
Tras una intensa labor, y el apoyo del Gobierno municipal local, el Pleno del Ayuntamiento de Alcalá aprobó definitivamente su construcción el pasado 19 de marzo.
Manuel Ibáñez explicó que en el lugar donde ahora se les recuerda con un arco de ladrillo ‘roto’ murieron al menos 16 personas, “víctimas” todas ellas condenadas en consejos de guerra sumarísimos sin posibilidad de defensa justa, con expedientes colectivos para ahorrar tiempo, con defensores sin preparación que no desdecían al fiscal, con pruebas de escaso peso basadas en delaciones, torturas o amenazas.
El presidente de la ARMHADH recordó el caso de dos hermanos allí fusilados, Antonio y Manuel Álvarez Vega. Ambos de Gerena, Sevilla, ambos asesinados en octubre de 1939 con 16 días de diferencia. Uno de ellos, Manuel, tres meses antes, desde la cárcel escribía a su mujer Rosario una carta que fue leída en el acto.
En uno de sus párrafos decía: “nos separan unos seiscientos kilómetros, un expediente sumarísimo y la incertidumbre que proporciona la lucha de los hombres por un bienestar pasajero”.
Manuel Ibáñez terminó su intervención indicando que “por la memoria de los que aquí murieron, demócratas que dieron su vida por impedir la opresión de una dictadura. Por ellos estamos aquí”.
El acto finalizó con un homenaje literario a cargo de los Poetas Nómadas, acompañados por la música de Rojo Cancionero.